Lo de Los Planetas y yo es una historia de amor que se fue consumiendo de tanto usarla. Hasta Unidad de Desplazamiento me gusta absolutamente todo, iba a sus conciertos, me compraba los discos y los admiraba incondicionalmente. Encuentros con Entidades fue la primera decepción, aunque conseguía enganchar gracias a algún temazo. Con Contra la Ley de la Gravedad me reconquistaron un poco, y cuando se pasaron al estudio del flamenco me perdieron para siempre. Reconozco su capacidad de evolución, pero a mí esa evolución no me gusta, podrían haber tirado por otro lado... ya se me acusó por aquí de querer que la banda hiciera un Autobús continuo, pero nada más lejos de mi intención, lo que no me gusta es la dirección que han tomado, no que evolucionen. Una Ópera Egipcia no ha hecho más que reafirmarme: un disco aburrido, mal producido, con colaboraciones que no aportan nada... Y, como siempre, alguna canción-pelotazo para que los fans de siempre estén contentos y puedan cantar en los conciertos. A mí, a día de hoy, me dan bastante igual, ni mal ni bien, y solo los veo en festivales, siempre y cuando no coincidan con otro grupo interesante.
2 comentarios:
Joder, a los dos nos ha pasado lo mismo con este grupo, parecia que estaba leyendo la historia de mi vida.
Ya no me preocupare tanto cuando mis amigos me señalen con el dedo jejeje...
Enhorabuena por tu blog
Madre mía... pasa el tiempo y aún no conozco a ni una persona que le guste el flamenqueo que se llevan.
(A mí tampoco me gusta un pelo.)
Publicar un comentario